Monet

Su nombre completo es Claude Oscar Monet. Nació en la ciudad de París en al ano 1840 y falleció en Giverny en 1926. Fue un pintor francés, uno de los maximos exponentes del movimiento impresionista. Sus inclinaciones artísticas nacieron de aquel lazo que tenia con Boudin y las excursiones al campo y la playa durante su adolescencia, las cuales orientaron el desarrollo de su pintura.

Monet se ofreció para el servicio militar en Argelia, luego de esto, regresó a París, donde conoce a jóvenes artistas como Renoir, Paul Cézanne y Degas.
La primera obra de Monet fue “La costa de Sainte-Adresse”, la cual le recuerda a su iniciador, Eugène Boudin quien fue uno de los primeros paisajistas franceses en pintar al aire libre. Mas tarde empieza a adquirir mayor alcance al aplicar la pintura directa a temas mas complejos.

También se puede ver el mismo cambió en la obra “Mujeres en el jardín” en donde aparecen tres mujeres divirtiéndose en el campo bajo un sol muy intenso que hace ver en sus vestidos el blanco en estado de gran pureza. Con esta obra, Monet se aleja de lo tradicional que hasta entonces se dio al retrato, el de su primera mujer: Camile, y se inclina por la naturaleza y sus formas.










Monet pasa por momentos dificiles al tener su primer hijo Jean, ya que se veia en una crisis económica. A el pintor francés y su familia les toco vivir una época de hambre y pobreza extrema. Mas tarde, en Inglaterra, Monet conoció a Pissarro y Turnet que vienen a ser de gran influencia en cuanto la percepción del color y la luz.

Un lugar que tuvo mucha importancia en algunas obras de Monet fue el estanque de Argenteuil. Se convirtió en su lugar idóneo para adaptar su técnica a la representación rápida del agua y la luz. Incluso, hay una obra llamada “Monet trabajando en su barco en Argenteuil”. En la obra se puede ver como el artista podía navegar sobre el agua del estanque apreciando los efectos luminosos de este mismo. 

Otra obra muy importante de Monet es “Impresión, sol naciente” donde la luz del amanecer y sus reflejos sobre el agua son impresionantes. Numerosas pinceladas se incorporan en un solo color general neutro, captando el instante del amanecer y los reflejos del sol rojizo sobre el agua.


A medida que va pasando el tiempo, la pintura de Monet se vuelve más compleja y la inmediatez y la euforia se transforman en insatisfacción y melancolía.

El ejemplo perfecto es la catedral de Ruán, en la que se evidencia, de un modo poético y didáctico, cómo las variaciones de la luz alteran la percepción del medio que transmite esa energía. Durante los últimos treinta años de su vida, el artista trabajó en torno a su jardín, en un prado vacío por el que pasaba un pequeño arroyo construyó. Tenemos a obras como “El estanque de las ninfeas” y “El puente japonés”.